- El centro fue seleccionado entre los más de 1500 proyectos que se presentaron en la edición del curso 2022/2023, siendo el único centro de Valladolid -y uno de los 100 a nivel nacional- presente en las jornadas de implementación y aprendizaje celebradas en Barcelona.
- La propuesta del colegio -orientada por el docente Fernando Álvarez y desarrollada por los alumnos Lucía Mateos, Sergio Valles y Víctor Casado- plantea una construcción naval que autoabastece su propio movimiento a través de diferentes fuentes energéticas sostenibles.
La innovación y la sostenibilidad son dos conceptos esenciales en el marco de desarrollo científico presente y futuro. Esta es la premisa de base que Lucía Mateos, Sergio Valles y Víctor Casado, alumnos del colegio La Salle, han llevado a cabo a través de “Dory”, propuesta de ingeniería naval reconocida como mejor proyecto de desarrollo sostenible en Valladolid por The Challengue EduCaixa.
De lo más de 1500 proyectos inscritos en la presente edición, los tres alumnos de La Salle fueron seleccionados entre las 100 mejores propuestas nacionales para participar del campus de implementación y aprendizaje celebrado en Barcelona del 3 al 6 de mayo.
En estas jornadas formativas, los alumnos tomaron parte de diferentes seminarios y talleres en los que profundizaron sobre la importancia del criterio comunicativo, la experiencia escénica, el emprendimiento social, el potencial de la programación abierta de Espacio 42 y las exigencias de la generación worldshaker en el desarrollo y la prosperidad del futuro. El grupo de alumnos contó desde el primer momento con la figura de los EduCoaches, asesores internos que ayudaron a los estudiantes en la progresión y en la exposición de su proyecto teniendo en cuenta los criterios de valoración del jurado.
La idea presentada detalla la construcción de un barco que plantea como foco de abastecimiento la recogida de plástico de mares y océanos, con el único fin de transformarlo en energía circular a través de un proceso controlado de combustión. Junto a este mecanismo, el barco incorpora turbinas hidráulicas para generar energía por medio de las corrientes marinas y una estructura paneles solares en la popa. La propuesta, que define un modelo alternativo de la industria naval, plantea de fondo la preservación de la vida marina y la reducción de las emisiones de gases tóxicos.